Inicio > Términos > Español (ES) > estado de flujos de efectivo por el método indirecto

Comienza con el valor de la renta neta tomado de la cuenta de resultados (cuenta de pérdidas y ganancias), a continuación se hacen varios ajustes que incluyen tres apartados principales: (1) Los gastos que no implican salidas en efectivo, por ejemplo: depreciación, impuestos diferidos y incremento de deudas pasivas, estos se suman; (2) las salidas de efectivo que no se registran como gastos, por ejemplo: los incrementos en el inventario, estas se restan; y (3) los ingresos que no implican entradas en efectivo, por ejemplo: el aumento de las deudas activas o las ganancias por las ventas de inmovilizado, estas se restan. Estos ajustes convierten el ingreso neto en flujo de efectivo neto de las actividades operativas. A esta cantidad se suman los ingresos en efectivo derivados de las actividades de inversión y financieras, y se restan las salidas en efectivo. La cifra resultante es el saldo de caja al final del período para el cual se ha preparado el informe. Aunque este método es más complicado, más de el 95 por ciento de las empresas lo prefieren al método directo (ver estado de flujos de efectivo por el método directo) porque muestra la relación entre ambas declaraciones clave de balances de estado financiero y cuenta de resultados. Además, evita la duplicación de esfuerzos en los casos donde se necesita un cuadro suplementario para conciliar los ingresos netos con flujos de efectivo de las actividades operativas. Sin embargo, no especifica operaciones de ingresos en efectivo y pagos. Se llama 'indirecto' porque procede del ingreso neto (en lugar de los pagos en efectivo y los desembolsos reales) que se ajusta para conciliarlo con el flujo neto de caja. Ver también el enfoque de ingreso neto ajustado.